Cuando se presenta un presunto hecho delictivo las autoridades deben comenzaruna investigación, que no es otra cosa que tratar de explicar lo ocurrido. Para el investigador surgirán numerosos cuestionamientos: ¿qué ocurrió?, ¿quién es lavíctima?, ¿hubo testigos?, ¿a qué hora sucedieron los hechos? entre otras muchas.Las indagaciones realizadas por los investigadores serán claves para plantear lasprimeras hipótesis,las cuales ayudarán a descubrir elementos físicos o testimonialesque ayuden a entender el hecho investigado.

El proceso de investigación se puede apreciar como un triángulo de relaciones:en el centro estaría el hecho investigado, en una de las esquinas el agente policial,investigador o detective encargado de realizar las indagaciones necesarias paraencontrar la verdad de lo sucedido; en la otra esquina estaría el investigador delescenario del delito encargado de recolectar los indicios; y en la tercera el perito delaboratorio encargado de analizarlos.

El investigador es más que un policía que llega al escenario del delito y su misión vamás allá de acordonar el lugar. Él deberá analizar la evidencia física y entrevistar a lostestigos, para aportar información a todas las demás personas que interactuarán con lainvestigación como el médico legista y peritos de laboratorio. La identificación de lasevidencias y los potenciales testigos requiere de unos criterios bien cimentados, quenecesitan un proceso de observación detallado y agudo, lo cual le permite discriminarpor características y vínculos entre sí. Investigar un delito requiere entonces de unpensamiento crítico que permita conectar la información fragmentaria para elaboraruna explicación veraz sobre el hecho investigado sustentada en demostraciones.